15 marzo 2006

Fin de semana en Aragón (III)


Cuando fuimos a Graus visitamos la casa de Pascual y Rosario, también familiares de Javi.

Ella es una mujer alegre, muy vital, muy activa. Pronto me fijé en la decoración de su casa, en todos los muebles restaurados e incluso objetos reciclados.

Pascual no quiso quedarse atrás. Nos enseñó el taller donde hace sus cosas. Desde arreglar una báscula que no fuciona hasta diseñar un aparato gigante que le sirve para girar su coche dentro del garaje sin esfuerzo y encararlo a la calle.

En uno de los rincones me encontré con esta mesita llena de enseres. En realidad, no pude dejar de hacer fotos desde que llegué hasta que me fui. Todo era muy curioso para una curiosa como yo. Me encantó conocer a dos jubilados tan inquietos y con tantas ganas de hacer cosas, sin hablar del carácter tan amable de ambos, que me hicieron sentir como en casa. Nos enseñaban sus historias con mucha ilusión. Pocas veces los jóvenes atendemos y hacemos caso a la gente mayor. Nuestro interés por sus movidas les conmovió y no nos dejaban marchar enseñándonos esto y lo otro.

Aquella visita fue muy útil para mí. En cada esquina veía fotos en potencia, veía ideas, ilusiones y a dos personas mayores que tienen tanto que decir...

1 comentario:

Ana Victoria dijo...

Qué bueno eso de dar vuelta el auto en el garage!
Me encanta conocer gente así, super creativa.