15 junio 2009

Divagando 2.0_

Banalidades….
Más que nunca le pasan a una las horas volando… y es terrorífico comprobar cómo escapan de las manos los momentos… Momentos vividos al límite… porque no sé convertir el mundo en algo banal. Nada en mí es banal (frase de Pablo). Pago un caro precio por sentir a estos niveles.

Nuevos conceptos…
Moteros. Entro por primera vez en una tienda Custom de motos y me encuentro con auténticas máquinas irrepetibles y exclusivas… ruidos atronadores. Primera rutilla, pequeña, con Pablo hasta Banyoles. Probablemente “la negra” haya sido creada para él y para que viaje sin “paquete”. Me duele el culete, no me lo siento. Pero es curioso el tema, la relación que existe entre esta gente, que sale en estampida los domingos a cabalgar en sus máquinas. Se saludan entre ellos sin conocerse. Incluso las que van de paquete, que siempre suelen ser del género femenino, lo hacen.
Me ha parecido curioso, el olor a testosterona que irradia este mundo, las barbas, la gasolina, el calor de las chupas de cuero, los colores y las “mujeres paquete” practicando su rol.
Me quedo con lo sexy de abrazar a tu conductor y espiar su perfil reflejado en el depósito de la moto.
Selección…

Siempre he practicado unos “cástings” importantes a mi alrededor sin darme cuenta. Cástings de personajes a los que quiero y a los que no quiero ver pululando por los alrededores de mi vida.
Lo hago porque no me gusta practicar la hipocresía fuera del trabajo. Bastantes úlceras me cuesta fingir ya en el “laboro” para tener que hacerlo también en mi vida privada. ¡Acabáramos! En mi tiempo libre yo decido de quién quiero rodearme. Y han aparecido algunos nombres que preveo serán borrados de ese entorno. La relación, ya lo veo venir, se va a reducir a la mínima e indispensable expresión para no herir a nadie. Es decir, es familia. Me la tragaré lo justito para ir tirando, porque es quien es.

1 comentario:

xnem dijo...

ojo con las curvas!